Gastronomía italiana


El origen de la pizza


Hoy en día conocemos la pizza como una masa de pan hecha al horno y cubierta de queso y salsa de tomate. Como tal, se dice que este famoso plato de la gastronomía italiana surgió en la ciudad de Nápoles a principios del siglo XVIII, origen defendido por la Associazione Verace Pizza Napoletana.

En sus inicios, la pizza fue un plato elaborado por y para las clases humildes de Nápoles, aunque posteriormente la empezaron a consumir las esferas altas de la sociedad, incluida la realeza. En principio, la venta de la pizza era, sobre todo, ambulante, pero con el paso del tiempo se abrieron pizzerías. La primera de ellas fue Antica Pizzería Port´Alba, fundada en 1738, y se encuentra en el número 18 de la Via Port´Alba de la ciudad de Nápoles.


Antuguamente no existía la amplia variedad de pizzas que hoy conocemos. La más antigua es la Marinara (Marinera), creada en 1734, y la más famosa la Margherita (Margarita) (1889), cuyos nombres esconden anécdotas históricas.

Además, la forma de hacer pizza es diferente en función de la región o ciudad italiana donde se elabore. Asimismo, la pizza de Nápoles es blanda mientras que la de Roma, la que elaboramos en Arrivederci Comida Italiana, es fina y crujiente.

Nuestra pizza de patata, romero y mozzarella, típica romana


Antecedentes de la pizza

Pero antes del siglo XVIII ya existía el concepto de pizza, aunque sin tomate, es decir, la pizza bianca (blanca). Hasta ese momento, los pizzaioli napolitanos (pizzeros) elaboraban este tipo de pizza -comúnmente conocida commo focaccia- usando ajo, perejil y aceite de oliva. Incluso podemos remontarnos a la antugüedad a la hora de hablar de la focaccia, un alimento popular entre los soldados de la Antigua Roma durante la época etrusca.

Sin embargo, hubo que esperar hasta el siglo XVI para que el tomate fuese introducido en Europa. Esta fruta -pomodoro en italiano, que significa manzana de oro- llegó desde Perú a Italia en 1554, pero tardó en ser utilizado en la cocina porque se consideraba una fruta venenosa y, por lo tanto, no comestible. Además, según algunos historiadores, la utilización del tomate en la pizza se podría haber debido a la competencia existente entre los vendedores de pizza y los de los espagueti.

Pan redondo encontrado en Pompeya


Incluso antes de la pizza bianca, los antiguos panes planos se consideraron antecedentes de la pizza. Así, hace tres mil años, diferentes regiones mediterráneas ya elaboraban panes planos condimentados con especias que tenían similitudes con la actual pizza bianca: en Grecia, los plakuntos; en Roma, la focaccia; junto con otros tipos de panes de los que se tiene conocimiento por los vestigios encontrados en Pompeya entre las cenizas del Monte Vesubio; en Persia, una variante con queso fundido y dátiles; y en el Antiguo Egipto, panes planos con hierbas aromáticas para celebrar el cumpleaños del faraón.

Fuente: WikipediaAssociazion Verace Pizza Napoletana

El por qué de su nombre


Los nombres de dos famosos tipos de pizza, Marinera y Margarita, esconden dos anécdotas que aclaran su elección.

      La pizza Marinara (Marinera), la más antigua, está recubierta de salsa de tomate, orégano, ajo, aceite de oliva y albahaca. Se llamó así por ser uno de los platos preferidos de los pescadores cuando volvían de sus jornadas de trabajo en la bahía de Nápoles.


Pizza Marinera


La pizza Margherita (Margarita) fue bautizada con ese nombre por Raffaele Espósito en 1889. Este cocinero, que trabajaba en la pizzería “Pietro … e basta così” (Pedro… y así es suficiente), actual Pizzería Brandi, fue invitado al Palacio Real con el fin de confeccionar tres nuevas pizzas para el rey Umberto I y la reina Margherita Teresa de Saboya. Finalmente, el veredicto de la reina falló a favor de la pizza que le recordaba a la bandera italiana por los colores de sus ingredientes: verde (hojas de albahaca), blanco (queso mozzarella) y rojo (tomate). Por este motivo, en su honor, Raffaele Esposito la llamó “Pizza Margherita”.



Fuente: Wikipedia

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